Reconstrucción mamaria: cirugía de restauración tras mastectomía
La reconstrucción mamaria es un procedimiento quirúrgico integral destinado a restaurar la forma, volumen y apariencia del seno tras una mastectomía realizada por cáncer de mama. Más allá de sus beneficios estéticos, este abordaje busca mejorar el bienestar emocional y la calidad de vida de la paciente, ofreciendo resultados duraderos y naturales.
1. Indicaciones y candidatas ideales
La reconstrucción mamaria está indicada en mujeres que han sido sometidas a:
- Mastectomía total o parcial por cáncer de mama.
- Niveles elevados de ansiedad o trastornos de imagen corporal tras la pérdida del seno.
- Deseo de simetría cuando el seno contralateral presenta volumen y forma normal.
Las candidatas ideales presentan estabilidad oncológica, buena salud general y expectativas realistas sobre los resultados y las cicatrices. La decisión puede realizarse en dos momentos:
- Reconstructiva inmediata: Durante la misma cirugía de mastectomía.
- Reconstructiva diferida: Meses o años después de la extirpación, una vez completados tratamientos adyuvantes.
2. Evaluación preoperatoria y planificación multidisciplinar
Un protocolo exhaustivo implica la colaboración entre cirujano oncólogo, cirujano plástico, radioterapeuta y, en algunos casos, psicólogo:
- Historia clínica oncológica: Tipo de tumor, tratamientos recibidos (quimioterapia, radioterapia).
- Evaluación del lecho mamario: Calidad de piel y tejido subcutáneo, cicatrices previas y estado vascular.
- Valoración del tórax y contralateral: Volumen, tamaño y forma del pecho sano para proyección equilibrada.
- Pruebas complementarias: Ecografía, resonancia magnética mamaria y estudio vasculo-nervioso según necesidad.
- Plan estético conjunto: Decidir tipo de reconstrucción, uso de implantes o tejido autólogo.
3. Técnicas de reconstrucción mamaria
3.1 Reconstrucción con implante o prótesis
- Expansor tisular seguido de prótesis: Se inserta un expansor pre pectoral, se va rellenando con solución salina en consultas sucesivas y, una vez alcanzado el volumen deseado, se reemplaza por una prótesis definitiva de silicona cohesiva.
- Reconstrucción directa con implante: En pacientes con piel de buena calidad y sin radioterapia previa, se coloca la prótesis en una sola cirugía.
Ventajas: Cirugía más corta y sin cicatrices en otras zonas.
Desventajas: Riesgo de contractura capsular y necesidad de recambios cada 10–15 años.
3.2 Reconstrucción con colgajos de tejido autólogo
3.2.1 Colgajo DIEP (Deep Inferior Epigastric Perforator)
- Origen: Grasa y piel del abdomen bajo.
- Ventaja: Evita la resección muscular, menor morbilidad y resultados muy naturales.
- Técnica microquirúrgica: Anastomosis de vasos perforantes a vasos torácicos internos.
3.2.2 Colgajo de dorsal ancho (Latissimus Dorsi flap)
- Origen: Músculo y piel de la espalda.
- Ventaja: Procedimiento robusto en pacientes con poca grasa abdominal y no candidatos a prótesis
- Combinación: Con prótesis para volumen adicional.
3.3 Técnicas mixtas y revisiones
- Lipofilling de revisión: Inyección de grasa autóloga en áreas de irregularidad o asimetría.
- Corrección de cicatrices: Z-plastias o láser fraccionado para mejorar estética.
4. Protocolo quirúrgico y tiempos de reconstrucción
- Reconstrucción inmediata: Mastectomía y colocación de expansor o colgajo en la misma cirugía prolongando el tiempo operatorio.
- Reconstrucción diferida: Programación 12 meses tras finalizar radioterapia.
Cada técnica requiere tiempos operatorios variables: expansión/protesis 2 horas; colgajos DIEP.
5. Cuidados posoperatorios y recuperación
5.1 Fase inmediata (0–7 días)
- Drenajes: En colgajos y expansores para evitar seroma.
- Analgesia multimodal: Opioides y AINEs.
- Movilización precoz: Movilidad de hombro asistida al día siguiente.
5.2 Fase intermedia (8–30 días)
- Expansiones (si procede): Rellenos de expansor según tolerancia.
- Revisiones periódicas: Control de perfusión en colgajos y estado de la piel.
- Fisioterapia: Ejercicios de fortalecimiento pectoral y movilidad.
5.3 Fase tardía (>30 días)
- Retirada de expansor: Sustitución por prótesis definitiva tras alcanzar volumen deseado.
- Rehabilitación: Ejercicios y fortalecimiento la musculatura.
- Seguimiento: Consultas semestrales el primer año y anual a partir de entonces.
6. Resultados y bienestar emocional
- Restauración del contorno: Estudios muestran alta satisfacción estética en >85 % de pacientes¹.
- Beneficio psicológico: Mejora de la imagen corporal y reducción de ansiedad relacionada con la pérdida del pecho².
- Funcionalidad: Menor dolor postural y mejoría de la postura corporal.
7. Complicaciones y su manejo
Complicación | Incidencia | Manejo |
Seroma en colgajo o bolsillo de la expresión/prótesis | 10–20 % | Aspiración guiada por ecografía |
Necrosis parcial de colgajo | 5–8 % | Desbridamiento y cobertura secundaria |
Contractura capsular (prótesis) | 5–15 % | Capsulectomía y recambio de prótesis |
Infección | <5 % |
8. Selección del equipo multidisciplinar
- Cirujano plástico especializado en reconstrucción mamaria con experiencia en técnicas microquirúrgicas.
- Equipo oncológico: Coordinación con oncólogo y radioterapeuta.
- Anestesista: Con manejo de colgajos y cirugía compleja.
- Apoyo psicológico: Servicios de psico-oncología para acompañamiento emocional.
La reconstrucción mamaria es fundamental para la recuperación integral de mujeres tras la mastectomía, devolviendo forma y restaurando la confianza. Con técnicas avanzadas y un equipo multidisciplinar comprometido, se logran resultados estéticos, funcionales y emocionales duraderos.
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