Lifting Facial: procedimiento de rejuvenecimiento integral del rostro

¿Has mirado tu rostro en el espejo y deseado recuperar esa firmeza y luminosidad de años atrás? En este artículo exploramos en profundidad el lifting facial, un procedimiento quirúrgico diseñado para eliminar el exceso de piel, tensar los tejidos y devolver a tu rostro un aspecto más joven y descansado.

¿Qué es el lifting facial?

El lifting facial, también llamado ritidectomía, es una intervención quirúrgica que reposiciona los tejidos faciales, elimina el exceso de piel y refuerza las estructuras subyacentes (SMAS) para combatir arrugas, flacidez y pérdida de volumen. A diferencia de tratamientos no quirúrgicos, consigue resultados duraderos y naturales.

Indicaciones y perfil del paciente

La ritidectomía está indicada en:

• Flacidez de mejillas y zona mandibular (líneas de marioneta y surco nasogeniano).
• Arrugas profundas y pliegues alrededor de ojos, boca y frente.
• Descolgamiento cervical (papada y bandas platismales).
• Pacientes generalmente entre 45 y 70 años, con buena salud y expectativas realistas.

No es un sustituto de un estilo de vida saludable, pero potencia los efectos de una piel bien cuidada.

Evaluación preoperatoria

Para planificar un lifting eficaz se realiza:

• Historia clínica: Antecedentes médicos, cirugías previas y factores de riesgo (hipertensión, tabaquismo).
• Examen facial: Calidad de la piel, grado de laxitud y volumen, y análisis de simetría.
• Pruebas diagnósticas: Analítica sanguínea, coagulación y ECG en mayores de 55 años.
• Consentimiento informado: Explicación de resultados esperados, posibles riesgos y cuidados posteriores.

Técnicas de lifting facial

Existen varias modalidades según áreas a tratar y extensión:

Lifting cervicofacial completo

• Incisiones: Frente a la oreja, envolviendo lobulo y extendiéndose hacia la región occipital.
• Reposicionamiento SMAS: Suturas que elevan la capa superficial muscular aponeurótica.
• Liposucción cervical: Eliminación de grasa submentoniana.
• Cierre: Suturas intradérmicas y piel con mínima tensión.

Mini-lifting (lifting de media cara)

• Incisiones más cortas en la región preauricular.
• Tratamiento focal de mejillas y surcos sin incisiones tras la oreja.
• Indicada en flacidez leve a moderada.

Lifting frontal y de cejas

• Técnica endoscópica: Incisiones pequeñas en el cuero cabelludo.
• Elevación de cejas y alisado de arrugas frontales.

Ritidectomía con hilos tensores

• Procedimiento híbrido que combina sutura SMAS y refuerzo con hilos de polidioxanona.
• Resultados intermedios entre lifting quirúrgico y no quirúrgico.

Protocolo quirúrgico detallado

• Anestesia: General o sedación profunda con anestesia local.
• Marcaje preoperatorio: Delineado de incisones y vectores de tracción.
• Disección de colgajos: Separación cuidadosa de piel y tejido SMAS.
• Elevación y sutura del SMAS: Refuerzo interno para la sensibilidad de resultados.
• Resección de piel redundante: Adaptación de bordes sin exceso de tensión.
• Cierre y drenajes: Suturas finas y, en ocasiones, drenajes cervicales.

La duración promedio es de 3 a 5 horas según la extensión.

Cuidados postoperatorios y recuperación

Fase inmediata (0–5 días)

• Vendaje ligero y mentonera para soporte.
• Analgesia: AINEs y, si es necesario, opioides leves.
• Movilización: Elevación de cabeza y ejercicios leves de cuello.

Fase intermedia (6–21 días)

• Suturado: Se retiran puntos de piel a los 7 días.
• Control de edema y equimosis: Crioterapia local y drenaje linfático manual.
• Actividades: Evitar esfuerzos intensos y exposición solar.

Fase tardía (>21 días)

• Retomar la normalidad: Actividades cotidianas y ejercicio moderado.
• Seguimiento: Revisiones a 1, 3 y 6 meses.
• Tratamiento de cicatrices: Láser fraccionado o silicona tópica.

Resultados y evidencia científica

• Durabilidad: Estudios demuestran resultados estables entre 7 y 10 años tras ritidectomía completa.
• Satisfacción: Más del 90 % de pacientes reportan mejora significativa en la percepción de juventud y autoestima.
• Mejora funcional: Alivio de tensión en cuellos y mejora de campo visual en casos de ptosis palpebral asociada.

Complicaciones y prevención

Complicación	Incidencia	Medidas de mitigación
Hematoma	1–3 %	Revisión meticulosa de hemostasia intraoperativa.
Infección	<1 %	Profilaxis antibiótica guiada por protocolos.
Pérdida de cabello	5 %	Incisiones cuidadosas y manejo de tensiones.
Parálisis temporal	<0.5 %	Conocimiento anatómico preciso..

Selección del cirujano y centro

1. Certificación: Miembro de SECPRE y/o AECEP y formación específica en cirugía facial.
2. Experiencia: Al menos 150 ritidectomías realizadas en los últimos 3 años.
3. Instalaciones: Quirófanos con equipamiento de cirugía facial y monitorización avanzada.
4. Atención integral: Servicio de seguimiento postoperatorio y acceso a terapias de rehabilitación facial.

El lifting facial es la opción más eficaz para rejuvenecer el rostro de forma duradera, tratando flacidez, arrugas y redefiniendo el contorno facial. Con protocolos quirúrgicos basados en evidencia y la selección de un cirujano con experiencia, podrás recuperar un aspecto descansado y juvenil.

Para una valoración personalizada y conocer en detalle cómo un lifting facial puede transformar tu rostro, contacta con la Clínica Sanz en Santander y Valladolid, donde combinamos excelencia quirúrgica y cuidado integral.